Bajo aguas tranquilas backdrop
Bajo aguas tranquilas poster

BAJO AGUAS TRANQUILAS

Beneath Still Waters

2005 ES HMDB
noviembre 2, 2005

Un Mal de origen sobrenatural está infectando el pueblo de Marinbad y a sus gentes, amenazando con extenderse más allá de sus límites geográficos. Algunos hombres del lugar consiguen que las autoridades construyan una presa que inundará para siempre el pueblo, sellando el Mal bajo las aguas. Pero algo quedó allí abajo cuando las aguas cubrieron Marinbad... Cuarenta años después, en la actualidad, varias desapariciones y muertes en circunstancias misteriosas asolan Debaria, el pueblo creado junto al lago artificial que cubre Marinbad. El Mal que habita en el pueblo sumergido está emergiendo de nuevo.

Directores

Brian Yuzna

Reparto

Michael McKell, Raquel Meroño, Charlotte Salt, Patrick Gordon, Pilar Soto, Manuel Manquiña, Omar Muñoz, Santiago Pasaglia, Evan Pontoriero, Norberto Morán
Horror

RESEÑAS (1)

RG

Roberto Giacomelli

Luis y Teo, dos niños curiosos, se cuelan en un pueblo desalojado por las autoridades que se prepara para ser inundado para dar lugar a un lago artificial. Los dos descubren que en los sótanos de la iglesia hay personas encadenadas que, al verlos, piden ser liberadas. Teo libera a uno de ellos, pero este lo mata y luego le da su cadáver de comer a los demás. Cuarenta años después, con motivo de la muerte de Roberto Borgia, alcalde de Desbaria, su hija Teresa y su sobrina Clara llegan desde Londres pero descubren que el pueblo está infestado por una entidad maligna que está corrompiendo las mentes de los habitantes y sembrando muerte. La Fantastic Factory tiene el mérito de haber relanzado el género de terror en España, abandonado durante demasiado tiempo y explorado en los años anteriores al tercer milenio de forma esporádica. Desafortunadamente, entre algunos títulos extremadamente válidos, la productora fundada por Julio Fernandez ha lanzado otros igualmente malos y, duele decirlo, gran parte de ellos llevan la firma de Brian Yuzna, cofundador de la compañía. Yuzna, aunque hace años que no dirige una película realmente "decente", ha conseguido hacerse un nombre en el panorama del terror gracias a algunos productos atractivos de principios de su carrera, entre los que citamos sin duda "Society", "Re-animator 2" y "El regreso de los muertos vivientes 3", pero desde que ha estrechado su colaboración con Fernandez, su firma se ha vuelto particularmente desvaída y gran parte de sus películas oscila peligrosamente entre lo casi mediocre y lo feo sin reservas. "Beneath Still Waters" pertenece definitivamente a la segunda categoría y muestra muchos de los límites que el cine de Yuzna de los últimos años presenta. Empecemos por el guión, escrito a cuatro manos por Angel Sala y Mike Hostench, basado en una novela de Matthew Costello. La historia no tiene mordiente ya de por sí, pero el guión consigue arruinar incluso las pocas ideas ganadoras debido a una total falta de interés por la más mínima construcción de los personajes (y pensar que la película cuenta una historia coral) y por una acumulación de elementos "robados" de la historia del cine de terror que no encajan bien entre sí. En algunas partes parece que los guionistas quisieron inspirarse en "Fog" de Carpenter, insistiendo en el aniversario de la ciudad y la maldición que en esta ocasión se abatiría (de vez en cuando podemos ver asomar una densa niebla), luego hay elementos claramente tomados de "Dagon", del amigo Stuart Gordon y también producido por la Factory, y así sucesivamente con elementos procedentes incluso de "Tiburón", "Creepshow 2" y "Pánico en la ciudad de los muertos vivientes". Los diálogos parecen particularmente planos y el ritmo de la película es peligrosamente lento durante gran parte del desarrollo, aumentando solo en los últimos veinte minutos. El problema fundamental es que se ha querido echar demasiada carne al fuego con el resultado de quemarlo todo: la película tiene zombis, fantasmas, maldiciones, profecías, sectas satánicas, catastrofismo, pero no desarrolla ninguno de los elementos y solo gira en vacío. En algunos puntos, incluso se llega al ridículo involuntario y viendo al tipo que es hecho girar en el aire o la cara amenazante que se materializa en el agua, solo se puede reír a carcajadas. La única escena que muestra un toque del Yuzna de antaño es la escena de la orgía que quiere claramente citar "Society" pero que al final solo resulta intrusa. La dirección es luego particularmente insulsa y anónima, perjudicada por una puesta en escena paupérrima de telefilme y por un reparto particularmente desganado y a menudo inadecuado para los roles asignados, basta pensar que la bella protagonista Charlotte Salt, que es de 1985, tiene por madre a Raquel Merono, que en el registro civil solo tiene diez años más que ella... ¡y se nota! Los únicos puntos a favor de "Beneath Still Waters" son los efectivos efectos de maquillaje y algunas secuencias splatter bien realizadas. Poco, diría yo. Extremadamente evitable.