RG
Roberto Giacomelli
•Antártida. En una estación de extracción petrolera comienzan a ocurrir eventos extraños: misteriosas sacudidas sísmicas y desapariciones de trabajadores. Mientras tanto, llega un grupo de recién graduados enviados allí como investigadores. Pronto, los jóvenes comenzarán a caer víctimas de algunos trilobites que habían quedado hibernados entre los hielos, despertados por las poco ortodoxas técnicas de extracción de petróleo que realizaban los funcionarios de la estación.
Basta la simple trama para dar una idea de la escasa calidad de la película en cuestión: "Deep Freeze", o cómo elegir un tema poco original y nada interesante y hacer una película mal hecha e inútil. En primer lugar, ¿por qué incluir en un fanta-horror con monstruos asesinos una amenaza desconocida para la mayoría como el Trilobite? Claro, la estudiante inteligente que de repente entiende qué está matando a sus compañeros de una pequeña explicación a los profanos de la paleontología, pero elegir como villano un crustáceo marino extinto en el Paleozoico no me parece la más feliz de las elecciones; considerando además que los trilobites se realizaron como grandes escarabajos con tentáculos inexplicables (?), nada inquietantes y casi nunca mostrados, hay una razón más para dejar esta película en el estante del videoclub. Apartando la absurda elección de la "amenaza", no se puede identificar ninguna razón que pueda salvar este producto directo a video de la basura: el desarrollo de la historia tiene una originalidad igual a cero; de hecho, durante toda la duración de la película no se hace más que seguir las poco interesantes vicisitudes personales de un grupo de jóvenes con ninguna caracterización psicológica, que uno a uno son atacados por un trilobite. Naturalmente no hay presencia de ninguna secuencia mínimamente cercana al gore, y a cada muerte debemos soportar una fastidiosa e insensata secuencia de flashes que nos vuelven a mostrar inútil y rápidamente imágenes ya vistas en la película. El sentido de inutilidad se refuerza por la construcción narrativa que recuerda de cerca la ya abusada del fanta-cult de Scott "Alien" y un ambiente robado de la obra maestra de Carpenter "La Cosa".
Dirección plana de John Carl Buechler, ya responsable del séptimo capítulo de la saga "Viernes 13" y del mediocre monster movie "Ork".