NO LO DEJES ENTRAR

Paige y Calvin son una pareja inglesa que decide pasar un relajante fin de semana en una casa en medio de los campos británicos. Se unen a ellos la hermana de Calvin, Mandy, una mujer obsesionada con frecuentar hombres tan ricos como odiosos, como Tristan, un personaje arrogante que solo adora su trabajo y el dinero y que decide unirse a ella para esta vacación. A pesar de que se les advierte sobre la presencia en el bosque de un peligroso asesino en serie que, después de matar brutalmente a sus víctimas, las descuartiza para luego colgar sus cuerpos en los árboles, deciden no renunciar a su viaje. Durante la primera noche de permanencia de los cuatro en la casa, llama a su puerta un hombre gravemente herido que ha sufrido un peligroso ataque; a partir de ese momento, los protagonistas comienzan a sospechar que el asesino pueda ser uno de ellos, hasta el descubrimiento de la intrigante verdad. Dirigido por Kelly Smith en 2011, "La casa en el bosque – No lo dejes entrar" no es más que una de las numerosas películas de thriller de terror en las que un grupo de personas se dirige a un bosque lejos de cualquier forma de civilización para encontrar un poco de relax y tranquilidad de la frenética vida cotidiana, para luego ser masacrados por el asesino en serie de turno. En su interior encontramos todos los clichés típicos de este tipo de películas, que a menudo se vuelven un poco demasiado banales y vistos cientos de veces. La ambientación en los campos británicos es de indudable impacto y particularmente adecuada para la trama, mientras que los protagonistas no han sido caracterizados de manera lo suficientemente detallada, a excepción de Tristan, que logra parecer despreciable y particularmente odioso tan pronto como pronuncia cualquier frase del guion; nos encontramos ante la exageración de la figura de un hombre de negocios egoísta que pone la riqueza y sus propios intereses en primer plano, desprendiendo cinismo y materialismo mezquino por todos los poros. Aunque la trama de la película es bastante aburrida durante más de la mitad de la película, en su interior podemos notar un buen número de ideas interesantes y, sobre todo, un giro inesperado en cuanto a la continuación de la historia. Para ser un thriller, "La casa en el bosque" contiene una buena dosis de tensión que mantiene la atención del espectador, despertando una discreta curiosidad que nos mantiene pegados a la pantalla durante toda su duración; imprescindible es la característica principal de muchos personajes que pueblan el cine de terror, es decir, su increíble estupidez que los lleva a cometer acciones insensatas que los conducen a situaciones de evidente peligro. En los 80 minutos de duración de la película encontramos violencia a raudales, acompañada de litros de sangre y momentos cargados de patetismo, aunque la producción ha ahorrado demasiado en los efectos especiales que resultan así bastante pobres y retrógrados; la cosa se acentúa con los colores de los escenarios, especialmente en lo que respecta a las escenas al aire libre caracterizadas por colores pastel casi desvaídos que dan ese sabor de los años 80 que, todo bien considerado, no desentona. Esta "La casa en el bosque – No lo dejes entrar" es, por lo tanto, una película sin infamia y sin elogio que se suma a otras decenas de películas que comparten la trama. Aunque en su interior haya varias ideas interesantes, en conjunto el trabajo es bastante insulso y de interés apenas suficiente.