RG
Roberto Giacomelli
•Marc está obligado a usar una silla de ruedas tras un accidente automovilístico causado por su joven esposa Kim. Ambos viven juntos con su perro en una gran villa en California. Un día, cuando Kim sale en coche para ir al pueblo, su marido le ordena al perro que la saque de la carretera. Así ocurre: Kim es ingresada en el hospital cercano en estado comatoso. El hombre, sin embargo, no se rinde y, decidido a eliminar a su esposa, busca por todos los medios desconectarla. Pero la mujer, que sostiene entre sus dedos las llaves del coche con el que tuvo el accidente, a las que está unido como llavero un amuleto que representa al dios de la venganza hitita, ha logrado desarrollar un poder extrasensorial que le permite controlar su automóvil.
Antes de que Charles Band emprendiera la exitosa carrera de productor y fundara Full Moon, antes de que en su vida entraran muñecas y juguetes con instintos homicidas, antes de todo eso, el simpático director/productor/guionista californiano había montado una producción de terror desastrosa titulada "Crash! – El ídolo del mal".
Era 1977 y Band, hasta ese momento, solo se había ocupado bajo seudónimo de la dirección de una comedia, "Last Foxtrot in Burbank": finalmente había llegado el momento de ponerse serio y dedicarse a la verdadera pasión de su vida, es decir, el terror. Con "Crash! – El ídolo del mal", también conocido como "Death Ride", Band tiene el mérito de anticipar un par de películas que poco a poco cosecharán éxitos, es decir, el casi contemporáneo "El coche negro" y el posterior "Patrick", el primero por el truco del automóvil asesino que luego alcanzará notoriedad principalmente con "Christine – El coche infernal" de John Carpenter, el segundo por el detalle relevante de la persona en coma con poderes extrasensoriales.
Probablemente la idea de Band era montar la ola de las películas de acción con motores rugientes y carreras automovilísticas que unos años antes habían cosechado éxitos aquí y allá, los diversos "Punto cero" y "Zozza Mary, pazzo Gary", que tanto gustan a Tarantino, para entender, y construir sobre ellos una pequeña historia de terror hecha de maldiciones y posesiones pseudo-demoniacas.
Hablemos claro, "Crash! – El ídolo del mal" es una película mediocre y narrativamente desastrosa, en la que cuesta mucho encontrar mínimamente plausible todo lo que ocurre. Desde el plan de Marc de deshacerse de su esposa utilizando a su doberman para sacarla de la carretera, hasta las motivaciones que animan al automóvil asesino. Pero los mismos personajes están poco y mal definidos, empezando por Marc, celoso y rencoroso, que quiere matar a su esposa porque la considera responsable de su parálisis, hasta Kim misma que parece continuamente a merced de los eventos, a pesar de su estatus de vengadora sobrenatural.
A pesar de eso, la película presenta cierta eficacia de película B, con escenas de acción bien dirigidas y suficientemente espectaculares, muertes raras y un reparto bastante acertado, en el que se destacan José Ferrer ("Sentinel"; "Drácula contra zombis") en el papel de Marc el malvado y la bella Sue Lyon ("Lolita"; "Alligator") en el de su esposa Kim. En un pequeño papel también aparece el mítico John Carradine!
No hay que subestimar la importancia anticipadora de la película, de hecho, además de los títulos citados que con sospechosa similitud tienen algunos elementos de "Crash! – El ídolo del mal", también está "Dal coma con vendetta", el bello episodio dirigido por Rob Schmidt para la serie "Masters of Horror", que se parece increíblemente a la película de Band.
No es bonita pero merece la pena recuperarla.
En DVD italiano (desafortunadamente cortado) de Mosaico Media.
Mira un clip de CRASH - EL ÍDOLO DEL MAL