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D-TOX (OJO ASESINO)

D-Tox

2002 DE HMDB
enero 4, 2002

Jack Malloy es un agente del FBI que se ha refugiado en la bebida para olvidar las heridas del pasado: unos años antes un psicópata asesinó a su esposa y a varios de sus compañeros. Para recuperarse decide ingresar en una clínica de rehabilitación para policías, pero el centro terapeútico se convierte en una una verdadera pesadilla cuando, al quedar aislado por la nieve, empiezan a aparecer pacientes muertos en circunstancias sospechosas

Directores

Jim Gillespie

Reparto

Sylvester Stallone, Polly Walker, Charles S. Dutton, Kris Kristofferson, Christopher Fulford, Jeffrey Wright, Courtney B. Vance, Robert Patrick, Tom Berenger, Stephen Lang
Horror Thriller Crime

RESEÑAS (1)

MC

Marco Castellini

En una clínica aislada en un rincón perdido de Wyoming, Jake Malloy, un agente del FBI que se ha convertido en alcohólico tras el asesinato de su joven prometida, se está sometiendo a una cura de desintoxicación. Tras una tormenta de nieve, la clínica, con sus diez ocupantes, queda cortada del mundo exterior; las cosas se complican aún más cuando un asesino loco comienza a matar uno a uno a los huéspedes del centro... Cinco años después del buen éxito de "So What Have You Done", el director escocés Jim Gillespie regresa a dirigir una película slasher con Sylvester Stallone como protagonista. Rodada cerca de Vancouver, en Canadá, la película tiene su personaje más importante no tanto en el resucitado Sly (que de "La Venganza de Carter" a "Driven" va de fracaso en fracaso) sino en el edificio que sirve de fondo a la historia: un búnker de hormigón armado, en parte subterráneo, claramente inspirado en los refugios de la Segunda Guerra Mundial. Por lo tanto, una ambientación claustrofóbica para un thriller estructurado como el más clásico de las novelas de Agatha Christie: "Diez Negritos". Todos los protagonistas (casualmente diez), encerrados dentro de una estructura de la que no pueden salir, comienzan a ser eliminados uno por uno, con la sospecha que se insinúa entre ellos; ingredientes típicos que deberían (o al menos deberían) mantener al espectador bajo una tensión constante. La sorpresa más positiva es que, por una vez, la película no escatima escenas de cierta violencia, vagamente inspiradas en la obra maestra de Fincher "Seven". En definitiva, una película slasher decente que carece de originalidad pero que puede resultar agradable, especialmente para el espectador menos "exigente".