The Eye backdrop
The Eye poster

THE EYE

見鬼

2002 HK HMDB
mayo 9, 2002

Ciega desde los dos años, Mann se somete, catorce años después, a un nuevo y arriesgado transplante de córnea.

Directores

Danny Pang Phat, Oxide Pang Chun

Reparto

Angelica Lee Sin-Jie, Lawrence Chou Chun-Wai, Candy Lo Hau-Yam, Edmund Chen, Yut Lai So, Chadatirud Lertaveesin, Yin Ping Ko, Florence Wu Wing-Han, Wisarup Annuar, Yuet Siu Wong
Horror

RESEÑAS (1)

SM

Simone Matano

Una joven no vidente recupera la vista gracias a un trasplante de ojos pertenecientes a otra joven, fallecida anteriormente, que tenía la capacidad de ver espíritus de personas fallecidas, así como de predecir lo que iba a ocurrir poco después. Cuando la protagonista se da cuenta de que gracias a la donante, además de la vista ha adquirido también sus capacidades paranormales, se encontrará investigando la historia de esta joven que reclama el descubrimiento de la verdad sobre su muerte y su dolorosa vida, con un final inesperado. En el momento del lanzamiento de esta película, el panorama cinematográfico internacional vio emerger en poco tiempo varias películas procedentes del Sol Naciente, que intentaron abrirse paso entre los superproducciones estadounidenses, que llevan décadas monopolizando indiscutiblemente el mercado en cuestión. El inicio no había sido negativo, pero hoy parece que todo haya sido solo un fuego de paja. La película aporta algunas innovaciones interesantes en el género de terror, introduciendo una trama cautivadora que involucra al espectador desde el principio, llena de giros inesperados y una historia (aunque muy irracional) que tiene un hilo lógico sólido y fluido. A ratos investigativo, a ratos conmovedor y cautivador, el producto resulta completo en todas sus partes y agradable de seguir durante toda su duración. Los efectos especiales están bien cuidados, los directores, con talento constatable desde las primeras escenas, han sabido introducir numerosos pasajes en los que el espectador "se estremece" en su asiento y siente, en la espalda, ese escalofrío tan querido por los amantes del género, gracias también a una hábil gestión del sonido que acompaña las imágenes. Entre los defectos, sin embargo, se debe señalar (para quienes consideren esto un defecto) el estilo de actuación visiblemente nipón de los actores, que aunque inevitablemente influenciado en parte por lo que es Occidente, sigue siendo muy compuesto y las expresiones de los actores son a menudo artificiales y "preparadas", en pleno estilo japonés; pero esto quita poco o nada a una película que sigue siendo de muy buen nivel en cuanto a dirección, fotografía, guion y trama. Si hubieran seguido preparando productos de este nivel en Tokio, probablemente los directores de "estrellas y barras" habrían tenido que remangarse pronto y competir con una realidad que ofrecía una alternativa muy válida a sus superproducciones.