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Giuliano Giacomelli
•Una epidemia mortal está arrasando en la ciudad, quitando la vida a millones de personas; la causa de todo parece estar relacionada con la picadura de ciertas zanzaras particulares. Para remediar la situación, un equipo de científicos está manipulando el ADN de una muestra seleccionada de zanzaras con el fin de crear un antígeno capaz de combatir el avance del virus. Un peligroso criminal, Ray Erikson, es llevado a los laboratorios para servir de conejillo de indias al antígeno obtenido, pero durante el transporte no todo sale como se esperaba y, poco después de acceder a los laboratorios, Ray Erikson logra liberarse y, en su intento de escapar, termina víctima de una explosión que someterá su cuerpo a una cantidad excesiva de antígeno. Erikson logra sobrevivir a la explosión, pero en poco tiempo su cuerpo sufrirá una rápida metamorfosis lista para generar una criatura repugnante mitad hombre y mitad zanzara, una criatura lista para deambular por los bajos fondos de la ciudad para saciar su insaciable sed de sangre.
La Nu Image, famosa productora de películas cinematográficas, televisivas y direct to video, ha vuelto al ataque y después de habernos "encantado" con películas de calidad media-baja distribuidas en nuestras videotecas todas en tiempos bastante recientes, nos ofrece su última obra, "Mosquitoman".
Pero en realidad, "Mosquitoman" (conocido también con el título "Mansquito") es simplemente la última obra llegada a nuestro mercado (y con un retraso considerable) de ese paquete de películas que la Nu Image produjo entre 2004 y 2005, un paquete de películas que incluía títulos como "Snakeman", "Sharkman", "Skeletonman" y "Metamorphosis".
Así, después de haber admirado las majestuosas deidades serpientes, los feroces hombres-tiburón y los viscosos parásitos listos para anidar en el interior del ganado, es el turno de ofrecer la escena a una criatura voladora mitad hombre y mitad zanzara, una criatura sanguinaria que puede ser tranquilamente e irónicamente considerada como la evolución de la temida zanzara tigre.
Una vez más, lo que la Nu Image nos propone es un inocuo teatrino de pocas pretensiones que no se propone ningún objetivo más que el de entretener al espectador delante de la televisión durante unos noventa minutos. Un producto, por lo tanto, no muy diferente en las intenciones de todas las anteriores producciones firmadas por la misma casa de producción. Sin embargo, a pesar de los evidentes límites presentes durante todo el metraje, "Mosquitoman" logra ser un producto altamente disfrutable y capaz de distinguirse notablemente de todos sus "colegas".
Lo que tenemos entre manos es un honesto B-movie, una película realizada con pocos medios, un puñado de ideas poco originales y incluso rica en secuencias un poco "tontas"; el hecho es que, sin embargo, logra convencer y fascinar al espectador que, dejándose llevar por la ingenuidad que está en la base del proyecto, tenderá a pasar por alto los defectos (que existen) para notar y apreciar los múltiples aspectos positivos.
La historia ciertamente no puede representar el punto fuerte de la película ya que no hace más que generar un collage de situaciones ya vistas en más de una ocasión: se comienza con una historia que recuerda mucho a "Mimic" de Guillermo Del Toro (la epidemia que se propaga, las zanzaras modificadas genéticamente para combatir el virus que ellas mismas llevan), se pasa por situaciones más clásicas típicas de "La Mosca" de Cronenberg para terminar, luego, en situaciones más "policíacas" que parecen salidas directamente de los archivos de "Detective Stone". Nada original, por lo tanto, por lo que un papel clave lo juega el guión capaz de mantener, desde el principio hasta el final, un ritmo elevado y capaz de fundir con mucha maestría el género policíaco con el más clásico de los monster-movies.
Parte del éxito de la película va sin duda a la brillante idea de querer evocar, de manera más o menos intencionada pero igualmente evidente, los viejos B-movies típicos de la década de los 80, esos films, es decir, que, aunque escenificando historias ingenuas con medios irrisorios, lograban sin embargo, gracias a su desenfado, encontrar la manera de encantar y divertir al espectador. Es imposible, de hecho, ver "Mosquitoman" sin que el pensamiento vuelva a ligeros pero agradables films como "Alterazione Genetica" y "DNA: Formula Letale" que nuestro L. Montefiori dirigió en 1990 (por citar solo un par).
A incrementar el tono nostálgico hacia los años 80 contribuyen los sabrosos efectos especiales realizados, en su mayoría, con simpáticos trajes de goma y prótesis de látex en lugar de efectos modernos y siempre poco aceptados en CGI; he aquí que el hombre-zanzara, listo para entrar en escena desde los primeros minutos de la película, será realizado casi exclusivamente con trucos old style genuinos y solo raramente con (desastrosos) efectos en gráficos por computadora.
También tendrá de qué alegrarse el fan del horror que esconde una debilidad por el gore y el splatter, ya que "Mosquitoman", en particular en la memorable secuencia final dentro del hospital, dejará terreno fértil a miembros arrancados, cabezas cortadas y cuerpos destrozados.
En este enésimo trabajo de la Nu Image, la dirección pasa a manos de un veterano del cine de terror, Tibor Takács ("No abras esa puerta", "Sola en esa casa"), que, aunque desempeñando su cometido de manera sobria, dirige todo con un tono televisivo quizá un poco demasiado acentuado.
Mediocre el reparto actoral compuesto por actores poco conocidos, muchos de los cuales procedentes de series televisivas, que no siempre resultan convincentes y a la altura de la situación.
En resumen, en la base de este "Mosquitoman" hay pocas pretensiones, pocas ideas originales, pero muchos elementos que sabrán hacer la alegría de ese espectador que se dispone a ver una película solo para pasar serenamente una hora y media de su vida.