MC
Marco Castellini
•En un centro de investigación marino se llevan a cabo experimentos en el cerebro de los tiburones para encontrar una cura para el cáncer. El resultado, sin embargo, no es el esperado: los científicos logran solo crear tiburones más inteligentes y más fuertes de lo normal, que en poco tiempo se rebelan contra ellos. Una película que se sostiene en los efectos digitales creados por computadora y en secuencias repentinas e inesperadas que hacen saltar al espectador de la silla (una de todas la secuencia de la muerte de Samuel L. Jackson). Una trama bastante delgada y predecible y un desarrollo de los hechos bastante inverosímil son, en cambio, sus puntos débiles. En definitiva, una película de monstruos bastante fluida, entretenida y con buenas dosis de sangre, pero no memorable.