FEAR OF CLOWNS

Lynn tiene un interés maníaco por los payasos que se deriva de una experiencia infantil en la que participó un payaso del parque de atracciones. Hoy en día, Lynn es una artista especializada en retratar payasos, pero al mismo tiempo es una mujer a punto de divorciarse de su marido y con mil dificultades económicas que no le permiten tener la custodia de su hijo. Un día aparece en la vida de la mujer un tipo disfrazado de payaso que comienza a acosarla y a matar a todas las personas que la rodean. Probablemente "It" ha causado más daños a la psique de algunos espectadores que cualquier otro producto televisivo. La bella película de Wallance, basada en la monumental novela de Stephen King, ha trastornado a una generación, ha convertido la coulrofobia en algo común entre muchas personas que fueron niños a principios de los años '90. El Pennywise, magníficamente interpretado de manera escalofriante por Tim Curry, se ha convertido en un ícono del horror y su sonrisa obscenamente dentada ha alimentado las pesadillas de muchos niños. "It" ha convertido al payaso de un ícono trágico felliniano a un terrible boogeyman, distorsionando nuevamente el sentido de un símbolo de alegría y diversión. Pero después de la diversión, la tristeza y el miedo, el payaso podría convertirse en el vehículo de un nuevo sentimiento: el aburrimiento. Después de ver "Fear of Clowns" uno se siente cansado, nervioso, oprimido por el aburrimiento y en un estado de indignación catatónica que solo induce un sentido general de desaliento y resignación. Desaliento dado por la conciencia de haber desperdiciado dinero y tiempo viendo una película profundamente mala, y resignación a la idea de que ahora cualquiera tiene la posibilidad de ver su largometraje distribuido en todo el mundo. A menudo no se entiende cómo se puede tener el coraje de distribuir tales aberraciones en celuloide; más allá del bajo costo de adquisición para las casas distribuidoras, ¿qué éxito se puede esperar para títulos como "Vampires vs Zombies", "Sete di sangue", "Dr. Chopper" o "Fear of Clowns"? ¿Qué espectador podría apreciar alguna vez las inexistentes cualidades de estas películas? Creo que la respuesta es "nadie" a ambas preguntas. "Fear of Clowns" está dirigido de manera menos que amateur por Kevin Kangas, autor también del guion y productor, en una apoteosis de planos y contraplanos aburridísimos que ni siquiera en las peores telenovelas argentinas se ven más. El guion parte de la fobia a los payasos, un tema que podría haber dado lugar a una historia interesante, para luego continuar como un thriller con connotaciones slasher de gran aburrimiento, capaz de contener en sí todos los defectos que una película de terror debería evitar. El boogeyman de turno es un hombre ridículo con el físico de un luchador y torso desnudo, con la cara (mal) maquillada de payaso que se pasea con un hacha para hacer pedazos (rigurosamente fuera de cámara) a cualquiera que se le cruce. Los actores son de una mediocridad desarmadora, quizá improvisados entre los amigos y conocidos del director, y la excesiva duración de casi 2 horas convierte la visión de "Fear of Clowns" en una tortura insoportable. Sigue siendo un misterio la razón que haya llevado al mismo Kangas a dirigir y producir incluso una secuela. Basura pura. ¡Manténganse alejados!