RG
Roberto Giacomelli
•Los tres delincuentes Mathias, Gabriel y Kyle, después de un robo que salió mal en el que Mathias también resultó herido, llegan cerca de una villa y para esconderse de la policía que los persigue, deciden entrar en la vivienda, tomando a los residentes como rehenes. En la villa vive el estadounidense Dave McBain con su esposa y sus dos hijos. Los tres deciden aprovechar la situación y le piden a McBain que les entregue su dinero: el asunto se vuelve cada vez más peligroso y aunque McBain y su familia se muestran muy cooperativos, Gabriel comienza a mostrar su naturaleza violenta.
"Vida en rehenes" es la última película para televisión – según la transmisión en primera visión de Canale 5 – de la serie Mediaset "6 pasos en el amarillo", que intentó revivir los éxitos del giallo italiano en la época de las ficciones televisivas. ¿Ha tenido éxito? En general, diríamos que no, tanto en cuanto al aspecto cualitativo general de la operación, oscilante entre lo mediocre y lo malo, como en cuanto al éxito comercial, que puede considerarse tranquilamente un fracaso, vista la media de 3/5 millones de oyentes por episodio.
"Vida en rehenes" lleva la firma de Lamberto Bava, que ya había dirigido "Presagios" y "Asesinato a medida". Tanto había decepcionado este director con sus trabajos anteriores, como satisface con esta última película, que puede considerarse entre las mejores cosas que han salido de esta serie de películas para televisión mediocres. Como en los dos films dirigidos por Edoardo Margheriti ("Bajo protección" y "Recuerdos"), hay que decir que seguimos quedando en el círculo del éxito parcial, es decir, de una apreciación que va exclusivamente en la óptica de la serie de la que los films forman parte, de lo contrario el juicio global sería probablemente más severo o en todo caso reducible.
El aspecto más positivo de "Vida en rehenes" es la ausencia de la trama amarilla. Dicho así podría ser considerado un contrasentido, además perjudicial en una serie de films que tienen como título común "6 pasos en el AMARILLO", pero vista la calidad bajísima de la escritura amarilla de prácticamente todos los films de la serie, no tener un mecanismo de whodunit no hace más que beneficiar al film. En realidad un mínimo de amarillo hay y interesa los antecedentes del personaje tomado como rehén, pero es una revelación altamente predecible que no daña ni realmente enriquece la trama y no pertenece a los cánones consuetos de la fórmula amarilla.
Los guionistas Stefano Piani y Alberto Ostini construyen un thriller que por ciertos aspectos recuerda "Aquella casa perdida en el parque" de Ruggero Deodato mezclado con la acción de Bruce Willis "Rehén", con las debidas y obvias distinciones que van a depurar la violencia y la morbosidad de uno y la riqueza y la acción del otro. El resultado es bastante envolvente en el intríngulis, con giros bastante previsibles (incluida la historia de amor secuestrador/secuestrada) pero capaces de dar solidez narrativa a todo.
Vistas las experiencias anteriores de la serie, aquí las interpretaciones de los actores resultan por encima de la media, gracias a las buenas actuaciones de gran parte del reparto, entre las que se distingue el ex Hércules televisivo Kevin Sorbo en el papel del secuestrado Dave McBain, Jane Alexander ("Elisa de Rivombrosa"; "El Comisario Manara"), en el papel de su esposa y Antonio Cupo ("Sonrisa"; "Barbarroja") en la parte del líder de los criminales Mathias.
No pidan sangre y sexo porque no los hay y el casta intento de violación a la hija de McBain, interpretada por Candace Marie, es lo más atrevido que "Vida en rehenes" tiene que ofrecer.
En la óptica de la televisión italiana una película ligeramente por encima de la media. Si les gustan las películas de invasión doméstica y han seguido la serie "6 pasos en el amarillo", vale la pena recuperar también "Vida en rehenes".
Nota redondeada por defecto.